#PajaroDiablo Abriendo su propio camino

Nos sumergimos en el barrio del Abasto para conversar con los integrantes de Pájaro Diablo, una banda multifacética, oriunda de Paternal, con gran despliegue en el circuito emergente. Se trató de una charla breve pero agradable en la que recorrimos la presentación de “Abrecaminos”, su álbum inaugural, el cual ya se encuentra en formato físico y en todas las plataformas online. 

El cuarteto integrado por Ernesto Herrera en voz, batería y acústica, Francisco Tasso en guitarra y sintetizadores, Leandro Gillig en bajo y Tomás Russo en guitarra, se autodefine como una banda que mezcla influencias setentosas con algunas actuales para obtener como resultado un sonido moderno y, sobre todo, propio. Asimismo, los identifica un rock and roll potente que suena al palo pero acariciando matices de funk y, por momentos, sentimos la fuerza arrasadora del grunge, transitando el camino de la búsqueda interior y la superación personal.

El vivo es definitivamente su momento. Se lucen y expresan su arte a toda máquina, llevando la energía a la máxima potencia. Algo comparable con una patada en la pera por la crudeza que exponen. Pájaro Diablo acaba de finalizar el rodaje del video clip «Espejos» y ya se encuentra en plena edición, por lo que muy pronto será presentado en sociedad. 

– ¿Cómo nace Pájaro Diablo?

Tomás: Al principio, empezó como un proyecto solista de Ernesto. Tenía algunas canciones y nos convocó de a uno. Fuimos trabajando un poco las canciones. Entre algunos cambios de integrantes y, a medida que fuimos colaborando, se fue gestando más como banda llegando a la actual formación.

-¿Qué nos pueden comentar sobre la producción de Abrecaminos?

Tomás: Veníamos de proyectos anteriores y no era la primera vez que entrábamos a un estudio. Fue una experiencia súper interesante. De hecho, tuvimos bastante pre-producción.

Ernesto: Teníamos bastante aceitadas las canciones y cuando llegó el momento pudimos grabar con seguridad y firmeza. Estábamos conscientes y conformes con el material.

-Antes que salga el trabajo en formato físico, salió de manera digital. ¿Por qué tomaron esa decisión?

Ernesto: Se fue gestando. Una vez que tuvimos el material, quisimos hacerlo público y lo compartimos a las tiendas digitales. Luego hubo un cambio de formación en el medio. Entró el bajista Leandro Gillig a partir de Febrero. Entonces, se dilató un poco la salida del disco físico. Fuimos reacomodando nuestras fichas para ponerle “play” e ir para adelante.

-Al ser una banda nueva, ¿les resulta difícil encontrar espacio para tocar?

Ernesto: Por suerte, pegamos onda con muchas bandas y nos dan una mano con eso y nos llaman para tocar. Especialmente en el conurbano que nos reciben bárbaro. Hay más bares rockeros y accesibilidad. Después, nos pasó que mostramos el material, gustó y nos dijeron: “esta buenísima la banda, vengan a tocar”.

-¿Quedó material pendiente para comenzar a gestar un segundo disco?

Ernesto: No sé si se quedaron cosas afuera pero se fueron creando ideas nuevas porque la nueva formación tiene otro sonido y aprovechamos eso.

-¿Cuáles son sus planes para 2018?

Ernesto: Estamos barajando la idea de ir a la costa, posiblemente. Luego, el sur del país. Posteriormente seguir con esta metodología de hacer conurbano, provincia de Buenos Aires y dos o tres shows en Capital.

Si todavía no conoces Pájaro Diablo, te compartimos «Abrecaminos», track número uno que le da comienzo a su placa homónima. 

 

«La pura consciencia es derribar muros que no están. La vida virtual no descansa«.

 

Fotografías: Gentileza de la prensa de Pájaro Diablo.